domingo, 17 de febrero de 2013

Pérez, el ratoncito

"Si tu diente me quieres dar, en mi barriguita lo dejarás, y con una sopresa mañana te levantarás"

Si a los pequeños de la casa se les está moviendo ya algún diente, id pensando en la operativa a seguir. Nada mejor que una fábula y un poquito de magia para convertir la intranquilidad en entusiasmo.

Mirad que monada de Ratoncito Pérez ha confeccionado mi amiga Esther Peinado, la mamá de Héctor y Lucía, dos nenes que son para comérselos. Está hecho en fieltro de varios colores, relleno de algodón y no le falta ni los bigotes. ¿A que es una buenísima idea para colocarlo debajo de la almohada esa noche tan especial?. A elegir, en rosa y en azul. Yo ya tengo uno para mi Pauli, aún no se le mueve ninguno, pero la pobre tiene unas ganas...



El ratoncito Pérez, de fama universal, ha dejado monedas y regalos bajo la almohada a niños de muchos lugares desde tiempos inmemoriales. En los países anglosajones quien cambia dientes por regalos es “El hada de los dientes”. No se sabe dónde ni cómo nace esta práctica; pero lo cierto es que niños de todo el mundo ofrecen sus dientes de leche, ya sea a un hada o a un ratoncito, a cambio de monedas o regalos.

Aunque la tradición tenga un origen remoto, que en España el personaje tenga nombre, apellido y casa propia, se lo debemos al Padre Luis Coloma, que a finales del siglo XIX escribe por encargo la historia del Ratón Pérez para el niño rey, Alfonso XIII. Su obra ha sido traducida y reinventada en muchas ocasiones.






Esther los realiza por encargo, así que si os queréis hacer con uno de estos ratoncitos tan coquetos para que vuestros hijos tengan un bonito recuerdo, comentádmelo por mail. 

Saludos!





1 comentario: